Las inundaciones pueden ser un problema muy importante y con consecuencias devastadoras, ya que no sólo comportan daños costosos y difíciles de reparar sino que pueden desencadenar problemas psicológicos por un gran sentimiento de pérdida.

Con el cambio climático, cada vez estamos viendo viviendas que quedan destrozadas después de una borrasca, o casas llenas de agua y barro tras un temporal. Y cuando esto sucede, o hay una inundación menor por una fuga de agua doméstica, son muy pocas las personas que tienen claro cómo proceder. En Hydroflomen nos encontramos frecuentemente consultas en este sentido y por eso hoy vamos a tratar de establecer una guía sobre cómo achicar agua de una vivienda.

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¿Cómo sacar el agua de una inundación?

Una historia sobre cómo achicar agua paso a paso

Para mostrarlo de una forma más clara y gráfica, vamos a explicar la historia de Ana, durante una mañana de tormenta y lluvias torrenciales que provocaron que el río cercano a su casa se desbordara e inundara parte de su hogar. Síguenos en su periplo:

Al despertarse y bajar por las escaleras, Ana vio que el agua estaba entrando en su casa, aunque tras evaluar la situación se dio cuenta de que el agua no alcanzaba niveles peligrosos y podría entrar en la zona afectada. Así que sin perder tiempo desconectó la electricidad para evitar cualquier riesgo de electrocución, y en su defecto encendió un generador de electricidad para poder poner en marcha la bomba de achique que guardaba en el sótano.

Las bombas de achique son recomendables en inundaciones en las que puedas acceder a una fuente eléctrica con seguridad

Colocó la bomba de achique donde el agua se acumulaba con mayor intensidad y permitiera un mayor caudal, y conectó una manguera de desagüe a la bomba, asegurándose de que esta estuviera libre de obstrucciones. Entonces dirigió la manguera hacia una área segura para el desagüe, lejos de la casa y de áreas propensas a nuevas inundaciones.

Cuando creyó que había hecho todo lo necesario, encendió la bomba de achique, ajustando la configuración según la profundidad del agua. Ana se sintió más tranquila al oír el ruido de la bomba empezando a trabajar, y se quedó a observar como el nivel del agua empezaba a disminuir lentamente.

Pero de repente, surgió un problema inesperado: debido a escombros arrastrados por la inundación, la manguera de desagüe había quedado obstruida, reduciendo el flujo de agua y ralentizando considerablemente el funcionamiento de la bomba. Al principio no sabía por qué la bomba estaba funcionando en peores condiciones y estuvo examinando el área, pero evitando el contacto directo con el agua siempre que fuera posible, ya que no sabía cuales eran las condiciones del agua encharcada. Lamentó no haber pensado en tener preparadas unas botas y guantes.

Cuando finalmente detectó el problema, apagó la bomba de achique y desconectó la manguera de desagüe. Entonces, con una escoba para limpiar la obstrucción se aseguró de que la manguera estuviera despejada antes de volver a conectar la bomba. Con gran alivio vio que la bomba de achique reanudaba el proceso de evacuación de agua adecuadamente, con un flujo de agua constante y eficiente, y que el nivel de agua volvía a disminuir.

En un momento determinado tuvo que ajustar la posición de la bomba, para asegurarse de que no quedara ninguna zona sin achicar. En ese momento pensó que hubiera estado bien disponer de más de una bomba para acelerar el proceso y asegurarse de una evacuación del agua completa. Sin embargo, cuando terminó con la mayor parte del agua, Ana acabó llamando a un profesional para que la ayudara con la limpieza y desinfección de su casa.

Herramientas para achicar el agua

En una inundación doméstica, hay una serie de equipos y herramientas que resultan esenciales para lidiar con la situación:

Bombas de achique: las bombas de achique son bombas de agua diseñadas expresamente para poder extraer agua de zonas inundadas, como parkings o sótanos. Son especialmente útiles en los casos en los que se ha producido un daño estructural o para acelerar el proceso de evacuación del agua, ya que consigue absorber toda el agua a través de una manguera y la expulsa donde decidas.

Si se trata de agua sucia, estancada con partículas en suspensión, la bomba de achique debe disponer de un filtro con capacidad para procesar esas partículas.

Generadores eléctricos: son necesarios para alimentar la bomba de achique u otras herramientas eléctricas cuando se ha cortado la electricidad, debido a la inundación.
Aspiradora de agua: en los casos en que hay agua estancada en áreas más pequeñas. Son perfectas para superficies duras como pisos con baldosas.
Mangueras de desagüe: se trata de tubos flexibles para desplazar el agua de un lugar a otro, como por ejemplo si quieres sacar el agua fuera de la casa o desplazarla a otra zona donde sea más fácil evacuarla. Pueden resultar un buen accesorio de las bombas de achique.
Otros accesorios complementarios, desde cubos, trapos absorbentes, escobas y todo aquello que facilite recoger el agua residual en áreas donde la bomba de achique no pueda ser de utilidad. También equipos de protección personal, como botas impermeables o guantes, que permitan trabajar en condiciones húmedas.

Qué hacer en una inundación

Si detectas riesgo de inundación repentina, hay que evacuar el domicilio lo antes posible, y si no puedes salir, es recomendable dirigirse al lugar más alto (dentro o fuera) de la casa. En caso de que estés dentro cuando la inundación se produzca, si es posible, evita nadar o caminar por las aguas de la inundación ya que pueden estar contaminadas y contener escombros.

A partir de aquí, hay muchos aspectos que son de sentido común. De la historia de Ana, puedes extraer una guía sobre cómo achicar agua con una manguera paso a paso en caso de que estés sufriendo una inundación en tu hogar :

Siempre que puedas hacerlo de forma segura y sin riesgos de electrocutarte, apaga la electricidad desde el interruptor principal, y corta el suministro de gas para prevenir fugas o incluso, posibles explosiones.
Si la inundación la está causando una fuga interna, debes tratar de cerrar la fuente de agua.
Pon a buen recaudo, lo antes posible, documentos importantes o pertenencias valiosas a nivel material o sentimental, ya que cada minuto cuenta.
Llama a los servicios de emergencia para comunicar la inundación y solicitar ayuda.
Cierra puertas y ventanas siempre que sea posible, para minimizar la entrada de agua.
Recoge evidencias para el seguro, mediante fotos o vídeos de los daños, ya que documentar la situación puede ser clave en el proceso de reclamación posterior.
Asegura la bomba de achique colocándola en el área más baja de la inundación, ya que de este modo se maximiza la eficiencia del aparato. Evidentemente hay que asegurarse de que está bien enchufada o, si la electricidad está desconectada, conectada al generador eléctrico.

Configura la bomba de achique según la altura a la que hay que evacuar el agua, asegurándote de que pueda achicar un buen caudal

Conecta la manguera de desagüe a la bomba y asegúrate de que no está obstruida y dirígete hacia una área segura para desaguar.
Inicia la bomba de achique según las instrucciones del fabricante, ajustando la configuración según la capacidad de la bomba.
Monitorea el proceso de achique y cambia la ubicación de la bomba según lo veas necesario. Puede que necesites realizar algún ajuste, por ejemplo si la inundación es extensa puede requerir que muevas la bomba.
Cuando hayas limpiado la zona afectada, se recomienda limpiarla de nuevo, utilizando lejía para el suelo y quitamanchas para la pared, para desinfectar correctamente. Y es que se trata de una zona en la que, aunque se hayan limpiado los escombros previamente, se verá afectada por la humedad. Incluso puede ser necesario requerir ayuda de un profesional, ya que dejar limpia y sin residuos las zonas inundadas puede ser un proceso difícil y complicado.

Cómo maximizar la eficiencia de las bombas de achique

Si te encuentras en esta situación y no sabes como achicar agua con la bomba de achique, te damos una serie de consejos para que maximices su rendimiento.

Si te encuentras en la situación de necesitar drenar agua en un espacio y te dispones a iniciar el proceso mediante una bomba de achique, la primera decisión importante es en qué parte vas a ubicar la bomba. Y la respuesta es, como ya hemos dicho, en la posición del área inundada más baja y de modo que esta quede sumergida, solo de esta forma conseguirás el rendimiento más óptimo.
A la hora de configurar la bomba, hay que hacerlo según la altura a la que hay que evacuar el agua. Es decir, si estamos en un sótano, habrá que tener en cuenta la altura del sótano, la distancia hasta llegar al alcantarillado donde se quiere evacuar el agua (añadiendo uno o dos metros más por la posible pérdida de carga). Esto significa que es recomendable contar con una bomba de achique capaz de achicar un buen caudal a un mínimo de 7 u 8 metros de columna de agua.
el nivel de agua, de modo que si estamos ante una inundación profunda se utilice una configuración que permita un mayor caudal, mientras que si el nivel de agua es bajo este sea más controlado.
Hay que asegurar que el flujo de agua es continuo y mantener la entrada de la bomba libre de escombros, sedimentos o algún otro tipo de obstrucciones, para evitar que la bomba se bloquee.
También tienes que asegurarte de que la manguera de desagüe es del tamaño correcto y que no está afectada por alguna torcedura o doblada.
Por otro lado, si estás usando un generador eléctrico deberás verificar que no está sobrecargado, ya que si el suministro eléctrico no es estable puede afectar al buen rendimiento de la bomba.

Y por supuesto, lleva a cabo un buen mantenimiento de la bomba de achique y sus accesorios para garantizar que cuando llegue el momento de usarla esté en buen estado. Se recomienda disponer de un kit de repuesto y tener piezas de recambio, como mangueras adicionales por si necesitas llevar a cabo una reparación rápida durante su uso.

Posibles causas de inundaciones domésticas

Son diversas las situaciones que pueden darse para sufrir una inundación en tu hogar, y según la ubicación de tu vivienda, puedes ser más propenso a sufrir unas que otras. Por ejemplo, las zonas costeras, las llanuras, las áreas ribereñas o las ciudades con un mal sistema de drenaje pueden ser zonas especialmente vulnerables. Por eso es importante comprender las causas específicas de las inundaciones, ya que sin ese conocimiento es complicado adoptar medidas preventivas adecuadas. Veamos las posibles causas más frecuentes:

Ríos o arroyos desbordados cuando se dan lluvias torrenciales y persistentes, que pueden afectar a los hogares de las áreas de alrededor.
Inundaciones costeras en regiones cerca de mares u océanos, donde las mareas altas pueden provocar fuertes inundaciones.
Sistemas de drenaje sobrecargados por lluvias intensas, que pueden afectar a las áreas residenciales. Si el sistema de drenaje urbano es deficiente o está mal mantenido puede causar inundaciones.
Deslizamientos de tierra en zonas montañosas, que pueden obstruir los cauces de agua y provocar daños en áreas bajas.
El fallo de infraestructuras como presas o diques.
La frecuencia de estas causas puede ser variable según la topografía del lugar, como decíamos, pero también la estacionalidad o los cambios en los patrones climáticos.

Cómo puedo prepararme de cara a una posible inundación

Cuando llega una inundación, parece que poco se puede hacer al respecto, pero lo cierto es que sí se pueden hacer algunas cosas a modo de prevención. Por ejemplo, lo primero y más importante es que todo el mundo esté a salvo, por lo que es importante desarrollar previamente un sistema de comunicación de emergencia y un plan de evacuación, identificando las rutas seguras y puntos de encuentro. En este sentido, puede ser bueno conocer los planes de evacuación locales.

También puedes asegurarte de que los documentos más importantes, como las identificaciones o la póliza de seguros, están guardados en un lugar protegido y son fáciles de transportar.

Pero en lo que se refiere a prevención, lo que debes hacer es asegurarte de que el sistema de drenaje está bien mantenido, libre de obstrucciones, y que el hogar está libre de filtraciones en techos, ventanas y paredes.

¡Y no olvides un kit de emergencia! Este kit debe contener elementos esenciales y debe ser fácilmente localizable para toda la familia. Su composición dependerá de cada unidad familiar, podemos encontrar desde agua potable y alimentos a un botiquín, dinero en efectivo, mapas locales, etc…